A UNIÃO INDIVISÍVEL DOS TRÊS SAGRADOS CORAÇÕES

São José

São José

domingo, 5 de agosto de 2018

ACUDAN, HIJOS MÍOS, ACUDAN A MI HIJO, ADÓRENLE EN LA EUCARISTÍA, ADÓRENLE EN EL SANTÍSIMO SACRAMENTO DEL ALTAR Y RECUÉRDENLE A AQUELLOS QUE NO CREEN NECESARIO LEVANTAR SU MIRADA HACIA EL CIELO, RECUÉRDENLES QUE DIOS ES DIOS (Cf. Is 45,5), QUE MI HIJO SE ENTREGÓ POR ELLOS Y RESUCITÓ Y SE ENCUENTRA ANTE USTEDES EN EL SANTÍSIMO SACRAMENTO DEL ALTAR Y QUE MORA EN USTEDES, EN SU SANTO ESPÍRITU.





MENSAJE DE LA SANTÍSIMA VIRGEN MARÍA
A SU AMADA HIJA LUZ DE MARÍA
21 DE MAYO DEL 2018


Amados hijos de Mi Corazón Inmaculado:

MI PROTECCIÓN ESTÁ SIEMPRE SOBRE USTEDES.
MI MANO PROTECTORA LES GUÍA HACIA EL CAMINO CORRECTO. POR ELLO LA TENGO EN TODO INSTANTE, EXTENDIDA ANTE CADA UNO.

Soy Madre y soy Intercesora de la Humanidad. Me urge la conversión de Mis hijos en este instante.

Amados hijos, les llamo nuevamente a examinarse interiormente. Este ejercicio es importante que lo lleven a cabo diariamente, ya que el instante es peligroso, el enemigo infernal no descansa en su deseo de perder a Mis hijos.

Yo les miro distraídos por las necedades humanas y por la incredulidad en que viven. La falta de fe crece cada instante en el Pueblo de Mi Hijo, que se encuentra confundido ante las incongruencias en el obrar y actuar de algunos de Mis hijos predilectos que no dan testimonio del Amor Divino. Esto se ha incrementado ante la falta de oración en las casas de formación.

Mis hijos predilectos deben distinguirse del resto del Pueblo de Mi Hijo no solo interiormente, sino deben distinguirse externamente debidamente ataviados para no ser confundidos con los laicos. Mis hijos consagrados al servicio de Mi Hijo por medio del Orden Sacerdotal y religioso, deben distinguirse del resto de Mis hijos para que el respeto siempre sea motivo de un trato diferente hacia el Pueblo de Mi Hijo y un trato diferente del Pueblo de Mi Hijo hacia Mis hijos predilectos.

Amados hijos de Mi Corazón Inmaculado, deben enmendar su camino y les llamo a amonestarse a ustedes mismos. A sus hermanos, con amor, amonestarles, pues las conductas, obras y actos incorrectos de esta generación todo lo permiten y no todo es permitido, para ello el Padre Eterno dejó Su Ley para todos los tiempos.


Amadísimos hijos, viven sin percatarse de lo cercanos que se encuentran los grandes acontecimientos a los que se enfrentarán, la paz que se firma no es verdadera, muy a Mi pesar. El hombre de poder desea dominar al mundo, por ello el águila que vigila desde lo alto y desea dominar absolutamente todo, caerá, pues quien cree poder dominar todo, no domina nada. Asimismo, el oso puede atrapar al águila cuando esta baje de su pedestal. No olviden que quienes han firmado alianzas va a romper dichas alianzas y los amigos llegarán a ser enemigos.

La Humanidad es cambiante, por eso la Fe es tambaleante y el hombre deja traslucir esa falta de firmeza espiritual que les lleva a una falta de firmeza en el ejercicio constante de su vida.

Amados hijos de Mi Corazón Inmaculado:

El ego humano mal empleado ha sido el causante de las discordias en la historia de la Humanidad y así ocurre en este instante. Por ello, Mis hijos deben examinarse cada día y entregar el ego humano a Mi Corazón Inmaculado para que no claudiquen, para que se corrijan en plena libertad. No todo el que crea que hace lo correcto cumple con la Ley Divina. Por ello es necesario que confiesen sus pecados, el deber de cada uno de Mis hijos es transformar el yo humano en el Tú Divino para que sean verdaderos.

Amados hijos de Mi Corazón Inmaculado, viven en el mundo, dentro de la locura y de la guerra espiritual en donde el Evangelio no es respetado, es algo más que se lee y por eso no es llevado a la praxis siendo Palabra Divina.

La Naturaleza ha sido azotada por la mano del hombre y así la Naturaleza llegará a no dar frutos para que el hombre sobreviva en la Tierra y por ello la carestía aumentará grandemente.

COMPARTAN MI PALABRA, NO SE LA GUARDEN USTEDES, HIJOS, AUNQUE SUS HERMANOS NO CREAN LO QUE USTEDES PREDIQUEN, LO QUE USTEDES HAN LLEGADO A ATESORAR Y A COMPRENDER, NO SE CANSEN, NO SE CANSEN PUES MI HIJO TIENE SED DE ALMAS. (Cf. Jn 19,28)

Amados hijos, la tecnología se verá afectada, aunque no lo crean, en breve se verá afectada y la Palabra de Mi Hijo que comparten a través de la tecnología bien empleada, dejarán de transmitirla a través de la tecnología debido a que ya esta no podrá ser utilizada por el hombre.

Hijos Míos, así como la Humanidad se encuentra en caos, el sol cambiará y este se volverá en contra del hombre y todo lo que el hombre ha construido para comunicarse, todo esto no podrá volver a usarlo con ese fin ni con ningún otro fin.

En este instante viven cada uno en su país, en su hogar, en su medio y no logran mirar más allá de su entorno, pues no ejercitan los dones que poseen ni ejercitan la inteligencia humana para pensar en aquellos que en este instante viven la carestía, la opresión, la rebeldía de los poderosos y ahí donde ustedes se encuentran, viven oprimidos aunque no lo sientan así, pues toda la Humanidad ha sido dominada por el grupo de poderosos del mundo que toman las decisiones del devenir en la historia de la Humanidad.

El clima es radical y este empeora, cada estación será diferente en los continentes, en los países, por ello vivirán climas extremos a los que no estaban acostumbrados.

Amados hijos de Mi Corazón Inmaculado, el hombre comete graves faltas, actúan saltándose las reglas e instrucciones verdaderas.

Oren, hijos Míos, oren por China.

Oren, hijos Míos, países pequeños sufren la crudeza, el rigor y la hostilidad del comunismo. Este se levanta sigilosamente.

Amados hijos de Mi Corazón Inmaculado, la tierra se estremece con fuerza en donde no se había estremecido anteriormente.
 
AMADOS HIJOS DE MI CORAZÓN INMACULADO, OREN, PERO OREN CON EL CORAZÓN y luego de orar con el corazón acudan a quienes padecen necesidades materiales y espirituales, pues la oración sin la práctica es una oración vacía.

ACUDAN, HIJOS MÍOS, ACUDAN A MI HIJO, ADÓRENLE EN LA EUCARISTÍA, ADÓRENLE EN EL SANTÍSIMO SACRAMENTO DEL ALTAR Y RECUÉRDENLE A AQUELLOS QUE NO CREEN NECESARIO LEVANTAR SU MIRADA HACIA EL CIELO, RECUÉRDENLES QUE DIOS ES DIOS (Cf. Is 45,5), QUE MI HIJO SE ENTREGÓ POR ELLOS Y RESUCITÓ Y SE ENCUENTRA ANTE USTEDES EN EL SANTÍSIMO SACRAMENTO DEL ALTAR Y QUE MORA EN USTEDES, EN SU SANTO ESPÍRITU.

Amados hijos de Mi Corazón Inmaculado, discípulos de los últimos tiempos, no les hablo del final del mundo, les hablo de esta generación que debe ser purificada ante una rebeldía sin límites con la que se dirige hacia Mi Hijo a todo lo que es de Dios, pues esta generación se ha entregado al dominio de satanás, pero ustedes, hijos Míos, no teman, YO SOY SU MADRE Y HE SIDO ENCOMENDADA POR MI HIJO PARA GUIARLES, PARA QUE USTEDES SE ACERQUEN A MÍ Y RETORNEMOS LA TIERRA AL CREADOR, ASÍ COMO EL CREADOR LA ENTREGÓ AL HOMBRE, EN ESE MISMO ESTADO.

Hijos Míos, no olviden que les había anunciado que el Pueblo de Mi Hijo sería estremecido por una noticia que lo confundirá más espiritualmente. 
Ustedes, hijos, sigan la verdad de la Sagrada Escritura.
Ustedes, hijos, caminen sobre el camino de la verdad.
Ustedes, hijos, apéguense a la Verdad del Evangelio.
Ustedes, hijos, son el rebaño de Mi Hijo y el Pastor Divino en cada palabra del Evangelio les habla para que ustedes no se pierdan.

Amados hijos de Mi Corazón Inmaculado, con Mi Corazón en la mano, esa mano que tengo extendida ante cada uno, les llamo para que no teman, pues no se encuentran solos, poseen a esta Madre que les llama y que les ama, no juzguen a quienes no me aman, pues todos son Mis hijos y yo a todos amo.

Reciban Mi Bendición en el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo. Les amo, hijos, les amo.

Mamá María

AVE MARÍA PURÍSIMA, SIN PECADO CONCEBIDA
AVE MARÍA PURÍSIMA, SIN PECADO CONCEBIDA
AVE MARÍA PURÍSIMA, SIN PECADO CONCEBIDA


COMENTARIO DEL INSTRUMENTO

Hermanos:

Ten presente que en los últimos días sobrevendrán momentos difíciles; los hombres serán egoístas, avaros, fanfarrones, soberbios, difamadores, rebeldes a los padres, ingratos, irreligiosos, desnaturalizados, implacables, calumniadores, disolutos, despiadados, enemigos del bien, traidores, temerarios, infatuados, más amantes de los placeres que de Dios, que tendrán la apariencia de piedad, pero desmentirán su eficacia. Guárdate también de ellos.” (2 Tim 3,1-5)

Amén.