MENSAJE DE NUESTRO
SEÑOR JESUCRISTO
A SU AMADA HIJA LUZ
DE MARÍA
27 DE MAYO DEL 2014
Amados hijos Míos:
PUEBLO MÍO: ¿QUÉ TE HAS HECHO, DÓNDE TE ENCUENTRAS?
Inmediatamente
me da Cristo esta Visión:
Me presenta Su Cruz ensangrentada y me dice:
“Se la ofrecí a Mis Hijos, y no la han deseado, Me la
regresaron…”
Cristo Me pide que le ayude a sostener la Cruz. Yo pude
sostenerla sólo un poco, pues Cristo no la soltó. Miré que
salían gotas de sangre de la madera de la Cruz, y la Cruz se
agrietaba profundamente. Por las grietas, yo escuchaba voces
humanas que suplicaban pidiendo consuelo; me asombré. En
silencio continué caminando al lado de Cristo, con mis manos en
la Cruz.
Me dijo:
“No mires al suelo, mira a tu derecha.”
Había una estructura grande, altísima y Cristo me dijo:
“Dirijámonos hacia ese Templo”.
En ese momento me di cuenta que era la Iglesia, y seguí al
Señor; pero pocos metros antes de llegar a la edificación, ésta
se resquebrajaba profundamente.
Entonces Cristo me dijo:
“Amada Mía, mira cómo está fracturada Mi Iglesia… Esta Mi Cruz
la continúo cargando por todos Mis hijos que Me desobedecen y Me
crucifican instante a instante”.
Vi unas criaturas humanas que le gritaban a Cristo que se
alejara. Cristo se detuvo y me dijo:
“Mira cómo Me crucifican Mis propios hijos, no Me desean en Mi
propia Casa, les incomodo ante el libertinaje que vive la
humanidad.”
Luego, inmovilizados ante esa escena, Jesús me continúo
diciendo:
Amada Mía:
Mira cómo se resquebraja Mi Iglesia; Mi Palabra ya no es Ley, Mi
Pueblo no se dispone a vivir en Mí, Mi presencia es descuidada
en la Eucaristía, no Me adoran debidamente, Mi hijos no oran y
por ello se pierden; no guía almas quien no ora, ni quien no
practica Mi Ley, Mi Amor y Mi Caridad. Mi Amor es oración y
acción a favor de los hermanos, es despertar al dormido. Un
hombre sin Ley es un hombre en el precipicio, en las tinieblas,
en una falsa libertad que no acoge sino le conduce al
liberalismo del pecado mundano.
¿Sabes cómo Me aman ahora?
Luz de María:
No podría decirlo, Señor.
Cristo:
Me visitan el domingo, y el resto de la semana… Me pisotean: al
negarle el auxilio al prójimo, al olvidar al enfermo y al
necesitado, al silenciar los abusos del poder. Me pisotean,
terminando
la vida del ser humano, atacando a los inocentes como fieras
salvajes, agrediéndose unos a otros sin ningún reparo, alterando
la Naturaleza para causar daño a poblaciones de un instante a
otro, enfermando a Mis hijos por medio de la alimentación,
transportando la energía nuclear a los países pobres para crear
alianzas basadas en el espíritu del mal.
Amada Mía, la humanidad hace sangrar Mi Corazón, y sangra...
Luz de María:
Sí, mi Sumo Bien, lo sé.
Cristo:
Mi misma Iglesia cortará el auxilio que recibe de Mi Madre, no
necesitan nada, se abastecen solos. Viven sin vivir, existen un
día tras otro. El pecado es costumbre y la costumbre lleva al
hábito.
Mis Instrumentos verdaderos trasmiten Mi Palabra mientras otros
luchan como lobos feroces y se lanzan en contra de éstos Mis
fieles, buscando desacreditar Mis Llamados a la humanidad.
ÉSTE NO SOY YO…, YO SOY PAZ, VERDAD Y AMOR. Ninguno tiene el
primer lugar, sino aquel que obra y actúa en Mi Voluntad, no el
que agrede, ése no da testimonio de Mi Palabra.
Está YA
pronto el instante en que la Tierra no se detendrá; al ser el
hombre más y más agresivo, la misma conciencia le llevará a
mantener su pensamiento y sus malos deseos hacia necesidades
mayores, al estremecerse la Tierra con fuerza.
Amados Míos:
Les invito a orar por Rusia, la tierra le estremece.
Oren por Chile, padecerá nuevamente.
Amada Mía, el hombre mantiene la ira, no el amor
en su corazón.
Luz de María:
Sí, Señor mío, la ira envenena los sentidos y enmudece los
sentimientos.
Cristo:
La humanidad ha sido envenenada por la tecnología, por las malas
directrices en todos los aspectos, Mi Institución es permisiva,
gana adeptos, no fieles.
Cuando el hombre corre sin alguien que le guíe, éste permite que
el mar de los sentidos se arremoline y destruya todo a su paso.
El alma es prisionera y el espíritu contristado ante los abusos
de quien actúa, olvidando que Yo llego a medir los actos con la
misma medida con que cada uno ha medido su proceder.
Quienes dicen amarme se devoran entre sí, se unen y dicen orar
en Mi Nombre, olvidando el Primer Mandamiento. Como lobos
hambrientos, se lanzan contra sus hermanos, invadidos por el
odio y la envidia, en busca de los primeros lugares. El que
quiera ser el primero, será el último.
Oren por Mi Iglesia, padecerá división. Mi Iglesia será
estremecida.
YO CONTINÚO CARGANDO MI CRUZ, ACERCÁNDOME CADA VEZ MÁS A TODA LA
HUMANIDAD.
MI JUSTICIA ES AMOR, Y CON MI AMOR
ME HARÉ CARGO
DE LOS QUE HAN ABUSADO
DE MI PACIENCIA Y MISERICORDIA.
Bendigo a Mis fieles, a los que predican Mi Palabra con la
Verdad, a los que no descansan evangelizando, a los que actúan
en el bien y alumbran como el Sol de Mi Voluntad.
Les bendigo.
Su Jesús.
AVE MARÍA PURÍSIMA, SIN PECADO
CONCEBIDA.
AVE MARÍA PURÍSIMA, SIN PECADO
CONCEBIDA.
AVE MARÍA
PURÍSIMA, SIN PECADO CONCEBIDA.
COMENTARIO DEL
INSTRUMENTO
Hermanos (as):
Cristo llama a la
conciencia de cada uno de Sus hijos.
El hombre, como lo
dice el Señor, desea alcanzar a Dios por el camino fácil.
Nosotros debemos elevarnos como las águilas: cuando el viento
sopla fuertemente y se transforma en una tormenta, ellas vuelan
más alto, porque saben que en las alturas la tormenta no les
tocará.
El enemigo del alma se
mueve con rapidez, enciende el pensamiento del hombre para que
actúe uno contra otro.
Dios se mantiene con
nosotros y nos dice: “No te dejaré, ni te desampararé…” Pero
nuestra batalla es contra nuestro propio egoísmo, y así
mantengámonos pues, a la escucha de la Palabra de Nuestro
Salvador.
Amén.