¡LA TECNOLOGÍA DE MUERTE CREADA POR EL HOMBRE SE REVERTIRÁ CONTRA ÉL Y ÉSTE NO PODRÁ CONTROLARLA!
ABRIL 20 DE 2015 - 7:50 A.M.
LLAMADO URGENTE DE DIOS PADRE A LA HUMANIDAD
Pueblo mío, os doy mi paz y bendición.
La energía nuclear será un
flagelo para la humanidad, muy pronto la tierra comenzará a tambalearse
y todas las plantas nucleares creadas por el hombre se
desestabilizarán y de ellas se escapará radiación que los hombres de
ciencia de este mundo no podrán controlar. Se desencadenará un escape
de radiación en cadena que contaminará la atmósfera del planeta,
trayendo nefastas consecuencias para la humanidad. La tecnología de
muerte creada por el hombre se revertirá contra él y éste no podrá
controlarla.
La muerte llegará a muchos
lugares de la tierra, el aire del planeta va a estar contaminado y la
ciencia del hombre no podrá hacer nada. Mi creación se rebelará contra
el hombre por todo el maltrato y abuso que ha recibido; la radiación
asolará regiones enteras y mis criaturas sufrirán mutaciones, las aves
morirán junto con las criaturas marinas y el suelo de la tierra sólo
malos frutos dará.
Una gran hambruna se acerca
como en los tiempos de Egipto, pestes y enfermedades incurables
aparecerán diezmando gran parte de la humanidad. Será la tecnología de
muerte la que se encargue de castigar al mismo hombre.
Pueblo mío, la soberbia y el
ansia de poder de los reyes de este mundo desatará la guerra y con ella
la muerte y desolación. Os digo que de no intervenir, el hombre de
estos últimos tiempos destruiría mi creación: ¡pobre de ti Jerusalén,
porque tus hijos e hijas irán al destierro y muchos morirán en su paso
por el desierto!. Los sellos ya están abiertos y todo lo escrito está
por cumplirse tal como le fue anunciado a Daniel. (Daniel 12. 9, 10) El
juicio a las naciones está por comenzar, los jinetes de mi justicia ya
recorren la tierra de oriente a occidente, de norte a sur. ¿Quién
podrá resistir los días de mi justicia?; los hombres de recto caminar y
sincero corazón, esos serán los únicos que podrán salvarse.
¡Mujeres de Jerusalén, entonad
cánticos plañideros y vestíos de sayal, porque la guerra está cerca y
vuestros hombres quizás no regresarán!. ¡Ay, Ay, Ay, estos son los ayes
de la hija de Sión, que llora y gime sin consuelo al verse ultrajada y
mancillada!. En los días de la gran prueba los hombres serán más
escasos que el oro de ofir.
Pueblo mío, despertad de
vuestro letargo, porque los reyes de este mundo se preparan para la
guerra; ya están listos los corceles y ya vuelan los pájaros de acero;
todo está listo y planeado para enlutar mi creación y diezmar la
población humana. La paz de los hombres está por terminar. Orad, ayunad
y haced penitencia pueblo mío, para que mi justa ira no extermine esta
humanidad ingrata y pecadora y puedan quedar sobrevivientes de esta
purificación los cuales serán mañana mi pueblo elegido. Preparaos pues
pueblo mío, porque el grito de guerra ya se deja escuchar; alistaos mis
valientes y entonad cánticos de victoria, porque los días de vuestra
libertad están cerca.
Vuestro Padre, Yhave, Señor de las Naciones.
Dad a conocer mis mensajes a toda la humanidad.