¡EJÉRCITO MILITANTE, SOLO LA ORACIÓN EN CADENA DERRUMBA LAS FORTALEZAS DEL ENEMIGO!
Junio 26 de 2015 – 8:13 a.m.
LLAMADO URGENTE DE SAN MIGUEL AL EJÉRCITO MILITANTE
Gloria a Dios en el cielo y en la tierra, paz a los hombres de buena voluntad.
Alabad al Altísimo porque eterna es su misericordia. Aleluya, Aleluya, Aleluya.
Simiente de mi Padre, estamos
librando fuertes batallas espirituales en vuestro mundo; las fuerzas
del mal han tomado poder por el pecado de esta humanidad ingrata que se
niega a aceptar a Dios y cumplir sus preceptos. En muchas naciones las
fuerzas del mal han formado fortalezas.
Naciones enteras hoy le
sirven al príncipe de las tinieblas y muchas han sido consagradas a él.
Mi Padre nos ha dado la orden en Divina Voluntad de rescatar de las
fuerzas del mal aquellas naciones que no han sido consagradas, pero que
sus habitantes por su pecado y maldad han permitido que los demonios
tomen posesión de ellas. Las naciones consagradas al príncipe de este
mundo, mi Padre las borrará de la faz de la tierra y no volverán a ser
recordadas.
Orad Pueblo de Dios por
vuestras naciones; haced mi Exorcismo dictado por mi Padre a su Siervo
León XIII, para que se me conceda a Mí y a los Arcángeles y Ángeles de
la Milicia Celestial, combatir junto con vosotros y liberar vuestras
naciones del poder de las tinieblas que hoy tienen sometidas a muchas de
ellas; acordaos que vosotros Pueblo de Dios, hacéis parte del Ejército
Militante. Por lo tanto, Yo Miguel, Príncipe de los Ejércitos
Celestiales, os exhorto a que os unáis en oración a los Ejércitos de mi
Padre para que juntos y por la gracia de Dios, expulsemos a satanás y
sus demonios que vagan por este mundo para la perdición de las almas.
Ejército Militante, no seáis
actores pasivos; acordaos que estáis ya en días de batalla espiritual;
orad, ayunad y haced penitencia. Atad y encadenad las fuerzas del mal y
ordenad en el Nombre de Jesús, que salgan de vosotros y de vuestras
naciones. Haced mi Exorcismo en cadena por vuestras naciones, ciudades y
lugares, pidiéndole primero permiso a mi Padre con la oración del
Padrenuestro, para que nos permita asistiros y venir en vuestra ayuda.
¡El tiempo de vuestra
liberación ya comenzó, despertad Ejército Militante!. Formad fortines
de oración; colocaos la Armadura Espiritual y reprended sin temor las
fuerzas del mal y os aseguro que satanás y sus demonios huirán
despavoridos. Vosotros sois Hijos de Dios y bien sabéis que el cielo os
asiste en todas vuestras batallas espirituales y no os deja solos, si
vosotros contáis con su asistencia.
¡Ejército Militante, sólo la
oración en cadena derrumba las fortalezas del enemigo!. Uníos en cadena
con el rezo del Santo Rosario a nuestra Señora y Reina y ella, nuestra
Capitana, os irá guiando en el combate espiritual de cada día. Los
misterios dolorosos del Santo Rosario junto con el Rosario de la
Preciosísima Sangre y Llagas de nuestro Amado Hermano Jesús, es
poderosa armadura para derrumbar fortalezas espirituales malignas.
Hacedlos por vuestras naciones y hacedlo a nivel mundial para que veáis
rodar por el suelo al ejército del mal.
Ejército Militante, no os
relajéis con la oración; ejerced dominio espiritual, porque bien sabéis
que la victoria es de los Hijos de Dios. Llamadme cuantas veces me
necesitéis y Yo, vuestro Príncipe, vendré con los Ejércitos de mi Padre a
daros toda la asistencia que necesitéis. Ya sabéis cómo me llamáis,
con mi grito de combate: Quién como Dios. Nadie como Dios. 3 veces
Consagraos a los Dos Corazones de Jesús y María y consagraos a Mí y a
los Ejércitos Celestiales, para que seáis verdaderos guerreros
espirituales. Que la paz del Altísimo os acompañe.
Vuestros servidores y hermanos. Miguel Arcángel y los Arcángeles y Ángeles de la Milicia Celestial.
Gloria a Dios, Gloria a Dios, Gloria a Dios.
Dad a conocer nuestros mensajes, hombres de buena voluntad.