¡COMO PRÍNCIPE DE LOS EJÉRCITOS CELESTIALES, OS HAGO UN LLAMADO URGENTE, TIBIOS DE CORAZÓN!
ENERO 20 2018 10: 10 A.M.
PARROQUIA CORPUS CRISTI CALI COLOMBIA
¿Quién como Dios? ¡Nadie como Dios!
Dad gloria a Dios, porque es eterna su Misericordia
LLAMADO URGENTE DE SAN MIGUEL A LOS TIBIOS DE CORAZÓN
Hermanos mortales, la Gloria
de Dios muy pronto se os manifestará, vuestro paso por la eternidad cada
vez está más cerca. Las Trompetas Celestiales están por sonar y los
sonidos del Shofar, os anunciarán que el día del Aviso está llegando.
Estad listos y preparados espiritualmente, para vuestro encuentro
personal con el Altísimo.
Si estáis en Gracia de Dios
hermanos, no debéis de temer, porque vuestro encuentro con Nuestro
Padre, será vuestro mayor gozo. Más si os sorprende este día en pecado
mortal o sin la Gracia de Dios, si debéis de temer, porque en vez de
Misericordia, lo que conoceréis será la Justicia de Dios. ¡Ay de
aquellos que los sorprenda el Aviso en pecado mortal, porque corren el
riesgo de perderse eternamente!
¡Cómo Príncipe de los
Ejércitos Celestiales, os hago un llamado urgente, Tibios de Corazón!
¿Qué estáis esperando para aceptar a Dios con sincero corazón? No sigáis
sin rumbo como hojas que mueve el viento, de aquí para allá. Dejad
vuestra tibieza espiritual, porque de seguir como vais, muchos de
vosotros os perderéis. ¡Tibios de Corazón, el tiempo se os está
acabando, si seguís en vuestra tibieza sin ser fríos o calientes,
vuestra falta de decisión, será vuestra perdición! Aceptad de una vez a
Dios en vuestro corazón, para que mañana cuando os presentéis ante El,
podáis ser contados como Hijos de Dios.
Tibios de corazón a muchos de
vosotros os espera el averno. Mi Padre permitirá esto para despertaros
de vuestra tibieza espiritual, porque no quiere que os perdáis.
Recapacitad hermanos de doble ánimo, aún os quedan unos pocos instantes
de Misericordia; acogeos a ella, para que vuestro paso por la eternidad
no sea vuestra perdición o peor pesadilla. Corred a poner vuestras
cuentas en orden y lo más importante, aceptad a Dios con sincero
corazón. No dejéis para último momento vuestra conversión, porque a lo
mejor no vais a tener tiempo, y os va a sorprender el Aviso, sin haberos
definido.
Mortales, mirad las señales
del cielo que cada vez se intensifican más, no sigáis en vuestra
terquedad; acogeos a los últimos instantes de Misericordia y recogeos en
oración, ayuno y penitencia, para que cuando el Amo llegue y toque a la
puerta de vuestra alma, os encuentre despiertos y seáis irreprochables.
Quedad en la Paz del Altísimo, hombres de buena voluntad.
Vuestro Hermano y Consejero Miguel Arcángel
Dad a conocer mis mensajes a toda la humanidad, hombres de buena voluntad